Salud Pública Se promueve la actividad física en adultos mayores para prevenir enfermedades crónico-degenerativas Bajo la premisa de mejorar la calidad y extender la esperanza de vida a edades avanzadas, referentes del Ministerio de Salud Pública difundieron medidas sociosanitarias destinadas a los adultos mayores.
La práctica de actividad física regular a partir de los 65 años, es la clave para prevenir enfermedades crónico-degenerativas.
La referente del Programa de Actividad Física y Salud (PAFYS), Sofia Dimitroff Petcoff, comentó que a medida que el adulto envejece, se vuelve más propenso al sedentarismo, lo que deviene en la pérdida de capacidades y habilidades físicas. La principal estrategia para retrasar la aparición de enfermedades no transmisibles o discapacitantes y disminuir los efectos del envejecimiento, es evitar la pérdida de actividad física.
Para los adultos mayores de 65 años, se recomiendan actividades recreativas o de ocio, desplazamientos –como paseos caminando o en bicicleta-, tareas ocupacionales -cuando la persona todavía desempeña actividad laboral-, tareas domésticas, juegos, deportes o ejercicios programados en el contexto de las actividades diarias, familiares y comunitarias.
“En esta etapa de la vida, es aconsejable realizar actividades de bajo impacto como caminar, andar en bicicleta, nadar, gimnasia acuática, subir escaleras, bailar, hacer yoga y gimnasia aeróbica”, puntualizó.
Envejecimiento activo
“Durante la ancianidad es importante permanecer activo física, social y mentalmente, la edad no debe ser, ni es, un obstáculo para realizar actividades que contribuyan a mejorar significativamente la salud y el bienestar de las personas”, ponderó la referente.
Entre sus principales beneficios, Dimitrof nombró el control del peso corporal; el aumento de la masa y fuerza muscular y densidad ósea; el incremento de la flexibilidad; la disminución de la frecuencia cardiaca y la presión arterial; el descenso del stress, ansiedad e insomnio; la reducción del consumo de medicamentos. “Estas actividades mejoran la autoestima, favorecen la socialización y juegan un papel importante en la prevención y tratamiento de enfermedades, como las cardiovasculares, la osteoporosis, la diabetes tipo II y algunos tipos de cáncer”, finalizó.
Fuente: Dirección de Prensa y Difusión
Jueves, 8 de octubre de 2015
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